sábado, 14 de mayo de 2011

Vietnam...exótico, amable y laburador.

Como siempre uno escucha algún comentario de los países a los cuáles vamos a visitar, y ya había escuchado de que la gente de Vietnam es amable, pero nunca me imagine que tanto. Vietnam es un destino exótico por dónde se lo mire, desde los paisajes con montañas y arrozales con gente trabajando en ellos, hasta el pensar que han pasado por tantas invasiones y guerras (China, Francia, EEUU y seguramente alguna otra), pasando por sorprenderse cómo la gente trabaja y trabaja en serio. La forma de transporte utilizada es la moto, pero en este país debería llamarse: mototaxi, motopaseo, motoauto, motocamioneta, motonegocio, motocamión!!! Por que digo esto? Es increíble el uso que le dan a las motos!! En las motos se transportan ellos pero a su vez las usan de camión, uno se sorprende cuando ve las motos llenas de gallinas, con familias enteras, o cuando se llena de canasto de frutas y van por la carretera con kilos y kilos de frutas arriba a los costados, adelante…sorprendente! Así como sucede eso, también se puede ver por las calles a la gente con la bici en mano cargada hasta la manija vendiéndote fruta, recuerdos, todo lo que se pueda imaginar (y lo que no) que pueda ser transportado, sin mencionar los palos largos que cargan con fruta en las dos puntas…sacrificado en serio!

Otra cosa que llama la antención acá es que todo cierra temprano a las 12 de la noche, a esa hora no hay nadie…pero nadie en la calle, los restaurants y boliches cierran a las 10 pero cerca de las 9 casi que ya cierran la cocina, eso si a las 6 de la matina ya es como de día acá porque hay mucha gente en la mañana, mi teoría es que como hay muchísima población que trabaja en el “campo” se acostumbraron a esos horarios.
En este país que no se puede evitar mirar a la población e intentar saber que es lo que piensan después de haber sufrido tanta guerra, casi que no existen las máquinas, casi todo es a fuerza sangre humana. Por ejemplo, según le entendimos a una guía cada familia tiene alrededor de una cuadra para trabajarla, en general tienen arrozales, pero en todo el viaje no he visto ni una sola maquina para cosechar, todo es a mano. Para el transporte ya mencioné que lo más usado es la moto, bici, y arrastre…realmente increíble lo que cargan en estos medios de transporte. Hasta para hacer carreteras se pueden ver varios vietnamitas picando con pico el suelo…increíble. Acá es dónde creo que entraría la disyuntiva de aplicar tecnología y ser un país más eficiente o directamente darle trabajo a mucha más personas con el costo de perder competitividad.

Primer destino...HA NOI

Nuestro avión llego tarde de la noche, y llegamos al hotel a eso de las 3 de la matina. Como siempre cuando llego a una ciudad, me gusta dar aunque sea una vueltita a la manzana para conocer un poco mi nuevo destino. A pesar de la hora, bajamos con Santiago y ya la recepción del hotel estaba hasta con las cortinas cerrdas, comentamos que queríamos dar una vuelta y nos abrieron, cuándo nos alejamos un par de metros el de la recepciòn nos dijo que tengamos cuidado con las cosas, porque a esa hora esta todo cerrado...después de tal advertencia se nos redujo un paseo de 15 min a uno de 1 min, caminamos un par de cuadras, estaba bastante oscuro, poca gente en la calle y nos volvimos rapidito para el hotel....je.
En el primer día nos dedicamos a recorrer la ciudad de la forma que a mi me gusta...a pie y sin mapa, pasamos por varias ferias dónde compramos alguna chuchería, pero siempre fastidiados por el regateo, pasamos por otras ferias de frutas, verduras, pescados, cangregos, etc. que no tenían desperdicio, vimos una estatua bastante grande que no tenemos idea de quién es, y nos maravillamos con el paisaje de una ciudad diferente.
Para el segundo día contratamos una excursión a la pagoda del perfume, para acceder a la misma hay que ir en omnibus (2 o 3 horas)tomar una canoa (1 hora), en este día fué que nos compramos los gorros tìpicos tipo cono, la verdad te salvan la vida, porque el calor que hacía era algo relamente de locos, y a pesar que no me puse protector no me quemé gracias al gorro que te da sombra hasta en los hombros (si ya sé piensan que los negros como yo no se queman, pero si, a veces me quemo). El grupo que recorremos Vietnam somos 15 es un buen número para que nos sintamos los suficientemente importantes y lo que contratemos seamos sólo nosotros, osea las excursiones las hacen sólo para nosotros, y fué asi esta ocasión un omnibus y una especie de canoa movida por fuerza humana para nosotros (hay que verlos remar con ese calor increible). Para llegar a la principal pagoda nos tomamos un CableCar (telesférico) y tuvimos que (cuando no) subir bastante escalones, nos encontramos con una cueva y como siempre estatuas de budas, inciensos, ofrendas, y gente resando. Visitamos algún otro templito por ahi en la vuelta y ya marchamos para el hotel, muertos de calor, transpirados hasta la manija y bastantes cansaditos.
Al otro día tendríamos una de las principales escursiones del viaje...

BAHÍA DE HA LONG...

Como nos pasó varias veces entre los 15 contratamos una excursión por la bahía de Ha Long y tuvimos un crucero sólo para nosotros, si sólo para nosotros y la tripulación que eran cerca de 6 o 7 personas (no estoy seguro porque son todos iguales, unos niños y chiquitos). Salimos al medio día de un día, paseamos entre las montañitas (no se como se llaman) entramos en un templo budista (cuando no) entre unas cuevas, metimos cayac con puesta de sol incluida (yo fui sólo en un cayak de a dos que estaba ensopado adentro y todavía el queso del guia me mando pa adelante...en la mitad del agua me fui para atras pq era imposible manejar eso). A la noche nos tiramos desde el segundo piso del barco al agua...sublime!! imaginense tirarse clavados desde la borda de un crucero al agua en la mitad de la noche! después que me sacaron la escalera para subirme al barco y por ende no me tire más, cenamos, yy..... fiesta!! empezó con un caraoke medio pedorro, pero después no podían faltar las cumbias! pusimos unas cumbias y movimos el esqueleto, estuvo realmente genial, y hasta algunos de la tripulación se animaron a bailotear con nosotros. Una experiencia que realmente la recuerdo y me sonrio sólo porque fué genial!
Al otro día el barco se aproximo a la playa de una isla y subimos a un mirador que era usado en la guerra, una vista hermosa, aunque la playa no era nada del otro mundo. A medio día volvimos a la costa para abandonar el barco y fué cuando estaban cargando agua que me dí cuenta la forma en que funcionaban las embarcaciones. Se acercó una especie de lancha con muchos tanques de agua que eran bombeados al crucero, la tripulación del barco se quedó en el mismo y vi llegar otro barco cargado de fruta. Evidentemente el crucero hace el mismo recorrido todos los días, sin tocar puerto, siendo abastecido todos los días en el mismo lugar pero sin tocar puerto alguno, y cambiando la tripulación quién sabe cada cuantos días... algo que me llamó la atención por lo menos a mi.

Otro destino que Hue… De compras y otras yerbas por Ho ian...


Visitamos por un día la ciudad de Hue, entre que no sabíamos que hacer y teníamos poco tiempo para visitar algun lugarcillo nos alquilamos unas motos con chofer incluido, la verdad que de los lugares que visitamos lo más divertido no fueron los lugares, sino el paseo en moto en si mismo, visitamos (cuando no) una nueva pagoda, y una especie de ciudad perdida china, la verdad me gustaron pila porque se sentía que estaban bastantes cuidados y se sentía buena “vibra” o como quieran decirle, se sentía tan bien que en uno de los templos dormi un ratito y quede planchado. Pero lo lindo fue hacer caravana los 15 en 15 motos, andando por caminos super angostos, y disfrutando andar entre ese paisaje diferente y rodeado de motos por todos lados, sin contar que el clima estaba realmente agradable para andar en moto.


El siguiente destino sería un destino realmente interesante para mi, pero mucho más para todas las mujeres ya que Ho Ian es famosa por hacer trajes y vestidos a medida a precios de ganga, según dicen algunos lugares salen hasta 10 veces más baratos de lo que saldría el mismo traje en Europa, yo por ejemplo me compre un buen traje a U$S70, después las gurisas no se compraron menos de 4 o 5 vestidos cada una, llegando hasta 10 vestidos (declarados quien sabe si no se compro algún otro)…je.

La verdad no me gusta nada ir de compras pero bueno estaba todo tan barato y bueno que tuve que hacerlo, pero lo más lindo fue que después que estuvimos como una hora con Nico eligiendo las telas de los trajes, terminamos agotados porque además el calor que hacía era algo increíble, fue entonces que una de las vendedoras nos dijo si queríamos que nos pase a buscar la camioneta…si un glamur increíble después de elegir trajes a medida con las mejores telas nos llevaron al hotel gratis y a que hotel! La verdad que fue el mejor de lo que va del viaje y a sólo 12 dólares. El Hotel con piscina (un día casi me quedo dormido haciéndome unos hidromasajitos), un desayuno bufet de los buenos, con todo lo que uno quiere para desyunar y algo más, una habitación haaarmosa con un baño realmente de duque revestido con mármol en las paredes y todo…realmente genial.
Bueno pero Ho Ian no fue sólo un buen Hotel, glamur, compras, sino que fue playa y motos, pero esta vez sin conductor, sino que los conductores fuimos nosotros. La playa realmente hermosa y más todavía que nos sentamos a la sombra, en reposeras gratis porque tomamos algo a la gente del parador (licuado de frutas por 15 pesos), la gran macana de la jornada es que me jodí la espalda nuevamente y ahora estoy hecho pedazos que no puedo estar más de 10 min. Parado, para justificar un poco el seguro fui al medico y me dijo que es fatiga muscular por todo el traqueteo, me resetó unas pastillas y unos parches, vamos a ver que pasa porque la verdad que esto jode bastante. La experiencia de andar en moto estuvo muy buena también ya que en realidad había manejado sólo una vez una moto y Santiago ninguna, y anduvimos para arriba y para abajo en las Scooters, muy bueno.
Tras sentirnos unos duques por dos pesos locos tuvimos que abandonar ese hermoso destino para ir a la ciudad de los enamorados en Vietnam…Dalat.


El romántico DALAT...

Según leímos, así para nosotros el “paraíso” sería una playa con palmeras, para los vietnamitas el “paraíso” bosque con montañas y neblina, y por eso Dalat es conocida como una ciudad romántica, además de que van muchas parejas a pasar su luna de miel.
Yo la verdad no la sentí muy romántico aunque si tenía cosas lindas como por ejemplo un laguito en el medio con unos cisnes que se subían las parejitas, y en una de las puntas del lago una especie de Torre Eiffel (o como sea). Llegamos a la noche, y nos dio más que nada para comer algo y volver al hotel para contratar la excursión del día siguiente. Al día siguiente nos levantamos temprano (esto es redúndate porque todos los días nos levantamos temprano) para ir a una excursión que tenía como Vedette la catarata de los elefantes, que no hay bicho parecido en la vuelta pero si una historia mística de la típica que se muere el elefante y dios llora y esas lagrimas son la catarata…a resumidas penas fue ese el cuento que entendemos. Acá va otra anécdota, cada vez que contratamos un guía es muy gracioso traducirlo, porque algunos no hablan nada de ingles otros nos defendemos con lo básico y otro algo básico y un poco más, a esto se le suma un guía que tampoco se hablan todo el ingles se revuelve en una excursión y se obtienen como resultado varias historias diferentes contadas por una misma persona sobre una misma cosa, las juntamos a todas las versiones de lo que cada uno entendió y hacemos una versión la cuál seguramente diste de la que quiso decir el guía…pero en fin algo es algo…je.
En fin la excursión estuvo buena porque los chinos nos quemaron en que todas las excursiones que hagas te quieren vender algo y te hacen paradas al cuete, pero en este caso tuvimos varias paradas interesantes, empezamos por la granja de flores (media chumi), seguimos por los campos de café (algo interesante), seguimos por la catarata del elefante, que la verdad no era algo gigante y majestuoso, pero estaba buena, bien natural como me gusta a mí, y más que para acercarnos tuvimos que treparnos y meternos por unas piedras medias complicadas. El tour siguió por una fábrica de seda, la verdad que esa sí estuvo muy bueno porque no me entraba en la cabeza como de los gusanos se sacaba la tela y es un trabajo muy artesanal que realmente estuvo bueno conocerlo, y más en esa fábrica que cómo es normal en Vietnam se hace todo a mano y muy pero muy poca tecnología, para cerrar la excursión fuimos a otra catarata que estaba más cheta que la anterior porque para llegar a ella tenías hasta unos autitos individuales (me tiré 2 veces) que estaban muy buenos.
Como el día anterior habíamos ido a comer a un lugar “normal” de esos que no me gustan a mí, decidí ir a la segunda noche a un bolicho de los que si me gustan a mí, esos bolichones en la calle donde se come la comida local, donde te mezclas con la gente de ese lugar, donde comprar comida es todo una aventura porque a veces ni sabes lo que estas comiendo, en fin me emociono sólo, esta vez por suerte no fui sólo porque Santiago se prendió. Pero previo al bolichon fuimos a hacernos unos masajitos a una casa de masajes…interprétese lo que se quiera porque yo todavía no entendí muy bien a donde fuimos, nosotros preguntamos por masajes y en la puerta decía “Masage and Sauna”…je. Fue una noche realmente genial, nos cruzamos con Nico que también quería meter algo local, y después de tomar unas cervecitas baratas nos dispusimos a probar comida nueva, empezamos por unos pinchos bastante comibles, aunque los pinchos de pollo estaban llenos de huesos (no preguntar la parte del pollo que estábamos comiendo era algo crucial), pegamos alguna fishball, y otra cosa que no me acuerdo ahora. Pero cuando estábamos atomizando a la vendedora que no sabía mucho ingles apareció una futura “amigacha” quién nos ayudó a comprar unas ostras que la verdad estaban increíbles! Las invitamos a comer con nosotros y nos quedamos largo rato hablando. La verdad que para mí hace la diferencia cenar y vivir experiencias inolvidables en lugares locales, exóticos y no visitar un mc Donald.

Ho Chi Minh city (ex Saigón)


Esta sería la última parada antes de partir a Camboya y la verdad que la esperaba con ansias ya que visitamos el museo de la guerra los Cu Chi túnel, dos lugares que estuvieron en los puntos más altos del viaje ya que es imposible no conmoverse con lo que vivió Vietnam en sus guerras y más particularmente frente a EEUU. El museo de la guerra la verdad que no era nada especial ya que sólo mostraban fotos y algún cartel de estadísticas, pero realmente conmovía ver imágenes de la guerra, ver las armas creadas por el hombre para tratar de hacer el mayor daño posible a otros hombres, los efectos del uso de los químicos (aún se pueden ver las consecuencias ya que vimos en varios lados gente con deformaciones), el sado que puede llegar a tener el hombre por… porque? Creo que no existe justificativo a tales atrocidades. Me pareció que era una especie de morbo cruza con falta de respeto sacar foto a las fotos por lo cual no lo hice, pero si saque foto a alguna estadística de gastos, vidas perdidas, etc. Como complemento en el museo había una especie de reproducción de los calabozos donde los americanos metían a los vietcon y más increíble se hacía pensar que una persona sea capaz de hacer tales atrocidades.
Una de las cosas que más me gustaron en el viaje fue la visita a los Cu Chi Túneles. Estos túneles con más de 200 km subterráneos fueron creados por los “vietcon” que era gente común que quería luchar por su país, supuestamente no eran militares, sino lo que se diría “el pueblo”. Parece que los túneles estaban ubicados en una zona estratégica ya que estaba entre Ho Chi Minh (ocupada por los norteamericanos) y la salida a Camboya, pero los americanos no pudieron sacar a los Vietcon, algunas razones eran que los Vietnamitas son muy chicos y los túneles tienen 3 niveles cuánto más profundo más chicos son, por lo cual los norteamericanos no podían entrar, y mucho menos con las armas y el equipamiento que llevaban. Algo increíble es que los Vietcom no tenían armas pesadas para “bajar” los tanques de guerra americanos, ya que nadie se animaba a proveerle armas por las dudas que EEUU se enoje con ese país, entonces los Vietcom les robaban las armas a los Norteamericanos o simplemente agarraban esas bombas que no habían explotado y las rearmaban, algo realmente increíble! Bueno después de sorprenderme hasta con la simpleza de las trampas de los vietnamitas y entrar en un túnel ampliado para los turistas (ver foto), nos pegamos unos tiritos con una AK47, no soy muy armero pero estaba bueno para probar. Algo realmente bueno de la visita fue llegar a la razón por la que creo que todos identificamos a Vietnam…por la guerra (desgraciadamente sea esa), lo malo es que mi espalda me estaba molestando bastante y tuve que ir al médico y básicamente me restó fatiga muscular por el viaje, dormir poco, descansar mal, estar mucho tiempo en actividad, etc . etc. para lo cuál recetó diclofenac en pastillas, intente hacer reposo y unos parches analgésicos…desgraciadamente gracias a este dolor de espalda comenzó cambiar un poquito mi viaje ya que tengo que limitarme a hacer cosas que me gustarían hacer, como estar todo el día para arriba y para abajo ya que es bastante molesto del dolor.
Según ya nos había comentado una guía la parte norte de Vietnam es más conservadora y tradicional (influida por el comunismo) y la parte sur dónde está Ho Chi Minh es más consumidora y superficial (influenciada por los norte americanos), la verdad que se pudo sentir la diferencia, eran como ciudades de diferentes países ninguna mejor ni peor, solamente diferentes ya que Ho Chi Minh, pareció más moderna con más autos, edificios, y una vida nocturna que en Hanoi era impensado, por ejemplo un día nos quedemos como hasta la 1 de la matina jugando al pool (en realidad fueron 3 partidos que duraron horas…je).


Después de la movilizadora e interesante visita a Ho Chi Minh nos embarcaríamos en un largo viaje de casi dos días hacia Siem Reap.

sábado, 7 de mayo de 2011

CHINA… un relajo sin orden.

Nuestro viaje en China comenzó por Beijin o Pekin, como más les guste, la actual capital de China. Como siempre el aeropuerto me dice algo del país y solamente para entrar a China (veníamos de Hong Kong) tuvimos que pasar como por 3 o 4 puestos de adunas, con sus respectivos escaneos presentación de documentación y etc. Al salir del gigantesco aeropuerto (luego de tomar un tren interno) nos encontramos con la primer peripecia…conseguir un taxi que nos lleve al hostel, increíblemente no había chance de que entendieran la dirección impresa ninguno de los taxistasm, ni la especie de policías que estaban ahí, el ingles o las letras como las que están leyendo no son muy comunes por estos lugares, y no sólo eso, sino que los tipos se ve que en su infancia nunca jugaron al dígalo con mímica, porque el lenguaje por señas es una materia que la perderían todos los años, esto sumado a que los locos te contestan en chino y a veces se calientan, hizo que en los primeros minutos del aeropuerto sea difícil concretar los 5 o 6 taxis que teníamos que pedir, pero como siempre es una anécdota con final feliz, porque llegamos todos bien al hostel (evidentemente después que nos curraron unos mangos de más por el transporte, esa materia si la salvan con honores).

BEIGIN...


En el camino el hostel ya podía ver que Beijin no es tanto lo que me esperaba, considerando que se habla tanto del crecimiento económico de China, que se hicieron los juegos olímpicos y es la capital, me imaginaba una ciudad ordenada , limpia, moderna…mmm ya había aprendido la lección de no esperar nada de los países y dejarme sorprender, pero bueno me falló eso porque Beijing me pareció una ciudad sucia (para nuestros parámetros de limpieza), con un tránsito ultra desordenado, gente no muy prolija, y un ingles escaso.
Al día siguiente arreglamos un paseo por el día para visitar la muralla china y alguna otra yerba, y acá es donde se ve que sobre gustos no hay nada escrito, sinceramente como me pasaba antes de visitarla, la muralla para mi… es una muralla, si me llama la atención que sea tan grande, pero bueno como se ve sólo un pedacito la verdad no me movió mucho. Después de subir miles de escalones para caminar sobre ella, la recorrimos y sacamos fotos típicas, pero lo más lindo para mi fue cuando nos metimos por una parte dónde supuestamente no se podía pasar, esa parte no estaba refaccionada y no es nada difícil que esté de la forma original… ahí nos entendimos un poco más con lo que quería ver…je. El guía que contratamos nos llevó también a una fabrica de piezas hechas con Jade (un laburo chino la verdad miren las fotos de como laburan y el resultado), fábrica de perlas, y a un lugar donde nos enseñaban a tomar el té de forma (semi) típica, un curro para que nos vendas cosas a precios muuuuuuuyyy caros, pero el guía siempre llevándose su cometita. Visitamos alguna tumba de algún emperador, y por suerte el guía nos tiró algún significado de alguna cosa, pero la verdad estos días vemos tantas cosas que es cuasi imposible acordarse de todo lo que nos dicen.
Al siguiente día teníamos cómo menú visitar la ciudad perdida y la plaza Tian Men (creo que no se escribe así), la verdad que la ciudad perdida esta graaaaande, estuvimos más de 3 horas y no nos dio para recorrerla completamente, nos contratamos unos autoguias que es un aparatito que a medida que te moves te cuenta cosas de ese lugar, pero la verdad entre el mundo de gente, que la radio cagada te hablaba rapidísimo, tenías que escuchar y caminar, sacar fotos, encontrar lo que te decía el aparato, fue difícil hacer un completo seguimiento de lo que decía, de todas formas algunas cosas quedaron como…… La ciudad perdida la verdad que para mi tampoco fue tal cosa, si esta bueno que sea una contucción grande y supuestamente está hecha con los mejores materiales, pero al entrar por ejemplo a las mancines se ve que está todo bastante descuidado, lleno de polvo, a mi me daba la impresión entre la mugre, el descuido y los colores, como que eran cosas austeras y hasta medias berretas (si ya se que soy un animal pero me dio esa impresión).
A la tarde fuimos al famoso mercado de ceda o ruta de ceda, y no es que vendan ceda, sino que por lo que leí está en el antiguo camino donde se transportaba la ceda. Solamente caminar por ese mercado es una experiencia divina porque los vendedores deben saber más idiomas de los que hay en la faz de la tierra, el "barato" "barato" (cuando te veían y no se como sabían que hablas español) y "tacaño" (cuando no comprabas) eran las palabras típicas. Despùes para aquellos que no les gusta que lo toquen no pueden ir, porque muchas veces te agarraban y te tiraban para adentro del puesto y no te soltaban, muchas veces pasabas y te pegaban y si preguntabas un precio ni te cuento. Lo que todos quieren saber... es barato? la respuesta es... sabes regatear? sabes cuánto es barato? para ambientar, el mecado es una expo yi grandota, sin precios por lo cual te tiran un precio por las nubes y tenes que emepezar a regatear, la mayoría de las cosas son buenas imitaciones, aunque hay de diferentes calidades, por lo cual en principio parece barato, pero todo de pende de lo que es barato para cada uno, para mi, por ser turistas y no entender muy bien que estamos en China compramos barato para Uruguay pero caro para China... se entiende?..je Yo pa variar no compre casi nada.
Para comprender un poco el cansacio acumulado que tenemos, despues de visitar todo eso y tener unas cuantas horas cansadoras algunos (agitados por mi) agarraron viaje para ver el famoso nido de pajaros (estadio olimpico de los juegos olimpicos 2008). La verdad que quería ir a verlo, pero nunca me imagine que me emocionaría tanto estando ahí. La conjunción del estadio, el cubo de agua, una torre que ni sabía que existía, y el entorno sabiendo que se desarrollaron las olimpiadas hace poco tiempo me hice mover hasta la ultima fibra y hasta se me piantó algún lagrimon...esos minutos le salvaron la plata y valieron la pena la ida a Pekin. Ya al otro día partiríamos a Xian, por lo cuál a pesar del cansancio sin duda que elegimos bien en hacer esa visita.

XIAN...

La llegada a Xian fué todo una aventura, viajamos alrededor de 15 hs en tren con el “pueblo” chino realmente, en general la gente del grupo hace avión, o sino viajan en tren pero en camas, nosotros como no conseguimos estas últimas viajamos en asientos “hard”. Bueno para empezar la estación de tren era una locura de chinos, realmente habían muchos, llegamos dos horas antes a la estación y ya había gente esperando, pero obviamente en una sala dónde habían asientos como para 200 personas habrían más de mil. La espera fue para algunos parados con los bolsos entre las patas, otros como yo nos sentamos en el piso, haciendo algún malabarismo con los bolsos y algún otro chino. La gente comía en ese lugar (tirando la basura en el piso, y yo lo se bien porque apoyé la mochila arriba de un chicle que me llevó un buen rato sacarlo), jugaba a las cartas, dormía, y como es muy común en los chinos también escupían en el suelo, un paisaje muy pintoresco. Tras (como es costumbre china) pechar a lo bobo para llegar a nuestros asientos, nos encontramos con que sólo podíamos dejar el equipaje arriba de una rejilla arriba de las cabezas, dódne metimos las valijas grandes pero todos los bolsos de mano y los que llevavamos mochila en vez de valija las teníamos que meter entre las patas, y todavía con asientos enfrentados, entonces se armó un lindo pusle entre las patas y los bolsos (recuerdo que eran 15 hs de viaje). A lo anterior de le suma que los aientos además de duros no eran reclinablesy que cada 3 minúntos pasaba un chino con sopa por el pasillo, sin contar que habían muchos parados en el pasillo lo que reducía más aún el espacio para meter las patas o hacer malabarismo para dormir. A pesar de todo lo anterior, el tren fue una vivencia que me gustó muchísimo, y si bien no dormí más de una hora y muy incomodo pasamos bárbaro entre bobadas que hacíamos, decíamos y los “amigachos” chinos que hicimos (los cuales hablaban poco y nada ingles)…experiencia para vivirla pero tal vez no para repetirla.
Una vez llegados a Xian, nos fue más sencillo llegar al hostel, porque uno de los “amigachos” nos escribió en chino la dirección, y luego que llegamos llamó al hostel para confirmar la dirección.
En el camino al hostel vimos que la ciudad era más linda que Beijin, más limpia y con más verde, y efectivamente después comprobamos que es más linda. El primer paseo que hicimos fue la pagoda del ganso, primero te cobran por entrar al “recinto” dónde están las estatuas y rezan los budistas, y luego si querés subir la torre… otra vez te cobran. La verdad que es muy interesante hacer esas visitas, pero creo que las disfrutaría mucho más si supiera un poco más del budismo y pudiera comprender los simbolismos. Delante de la pagoda hay una fuente gigante que cuando nos íbamos como siempre llegamos para ver dos segundos del espectáculo que había con sonido y los chorros de agua. Intentamos investigar a que hora había otro show porque pintaba muy bueno, y tras que 3 chinos nos dijeron horas diferentes, creo que inventamos un cuarto horario, fuimos a la noche y tras esperar un par de horas realmente valió la pena la ida porque estuvo muy pero muy lindo. Este es el punto unto con otros dónde decimos cómo con no mucho (algún chorro de agua) se puede hacer un lindo espectáculo para los turistas y la propia población de la ciudad… y bue…A la vuelta vivimos una experiencia EXTREME al venirnos en una motito que nos llevó de a 4 para el hostel, entre que el tránsito es un caos estos tipos son unos camicases y realmente estábamos en un carrito de super con ruedas, la experiencia estuvo bastante buena y más cuando parecía que nos llevaba puesto algún auto y nos parecía que íbamos a partir al medio alguna otra moto.
Otro paseo que hicimos en Xian fue pasear en bici por arriba de la muralla que la rodea, e sta ciudad fue la antigua capital de china y estaba rodeada por una gran muralla (para imaginarse tardamos una hora 20´ para darla vuelta en bici de a 2…je), muy lindo paseo, porque además de ser algo totalmente diferente y ver desde arriba vistas de una ciudad china, nos divertimos andando en bicis de 2 entre nuestro grupo.
A priori teníamos como “vedette” de los paseos los soldados de terracota, que según todo lo que habíamos visto era algo espectacular y declarado como patrimonio de la humanidad por la Unesco. Estos soldados fueron creados para proteger la tumba de un emperador, ese es el resumen, porque si bien contratamos una guía, la verdad no fuè muy buena porque iba a los pedos, no le entendíamos 100% lo que decía y si le preguntabas algo te repetía algo diferente o algo que ya había dicho, era como un cd que repetía 7 u 8 canciones. Realmente es asombroso como se hizo todo eso para la tumba de un emperador y nunca pudimos comprender porque estaban enterrados y no se sabía de ellos, es de recordar que todos tienen tamaño escala real, simulan un ejercito real con general, y los diferentes rangos militares y todavía todos tienen rasgos, vestimentas y físicos diferentes. En la actualdad “desenterraron” alrededor de 6000 pero dicen que hay otros miles esperando a que se encuentre una nueva técnica de refacción porque cuando se sacan pierden su color original. Ya en la útima noche nos fuimos a tomar cerveza por 3 pesos (4 yuanes pero recuerdo q a la moneda local les decimos pesos), a unos boliches al costado del Hostel. La verdad fue la mejor noche hasta el momento, la verdad que el lugar era una real mugre sentados en mesitas bien bajitas en la calle, mimetizándonos entre los chinos pero con el estilo uruguayo que nos caracteriza…mucho más extrovertidos y divertidos. La verdad que en la última noche nos encariñamos con ese lugar que no era para nada prolijo pero nos gustó y mucho ….ahh al final terminamos pagando la cerveza a 2,5 (tengo que reclamar alguna foto para mostrar lo que era ese lugar… las debo).
Shangai

SHANGAI...

Para mejor publicidad China fuimos de peor a mejor, y Shangai es un poco más lo que me gusta, ciudad más moderna, con edificios luminosos, televisores gigantes como palomas en Montevideo, a tal punto que en la bahía hay dos rascacielos que la fachada son televisores enteros (ver foto). En este destino además de maravillarnos con las magnificas vistas de los modernos rascacielos (más que nada por la noche), fuimos a un parque con jardines típico Chino. Lastimosamente como no fuimos a Japón me quedé con todas las gjanas entre otras cosas de visitar un jardín japonés, y pensé que el chino sería similar…error! Si bien no era para nada lo que me esperaba y en vez de ser colorido con flores y verdes, no estuvo nada mal. Es increíble como estos muchachos usan la piedra como esculturas…mmm no me convencieron mucho pero más asombroso es la cantidad de estatuas que meten, era imposible mirar alguno de los techos de las habitaciones y no ver alguna estatuita, la verdad que es impresionante como estos tipos llenan de estatutias chicas pero muy bien hechas.
El útlimo día algunos hicimos lo que me gusta a mi…perderme en la ciudad sin mapa, visitar lugares no turísticos para ver la realidad de ese país y la verdad me asombré como la globalización es un fenómeno que no es de la boca para afuera, sino que es real, si pongo una foto de cualquiera de las cuadras que visitamos caminando y pregunto que país es, sacando las letras creo que nadie lo identificaría como China.
Algo peculiar que nos pasó en China es que muchas veces nos sentimos estrellas de Rock porque cantidd de veces nos pedían para sacarnos fotos con ellos, pero lo curioso fue un día que estábamos escribiendo postales en una escalera y la gente paraba…si paraba para ver lo que estábamos haciendo, formándose varias veces multitud de gente mirándonos…bicho curioso el chino.
Shangai fue el último destino de un país que tenía que estar en el itinerario de “EL VIAJE” por todo lo que representa, la verdad que no pasé para nada mal y me gustó muchísimo visitarlo, pero más que nada por vivir experiencias, sabores y asimilar un poco la cultura de ese famoso país, pero no es un país que repetiría por motivos turísticos…ATENCIÓN QUE EN CUALQUIER MOMENTO SE VIENE LA SECCIÓN “LOCURA GUSTATIVA”, con alguna foto de alguna cosa que he probado porque algo que me encanta es estar probando comidas nuevas…

viernes, 6 de mayo de 2011

HONG KONG...el mejor pan del mundo.


Llegamos a Hong Kong medio de rebote, ya que mi grupo no iba a hacer Hong Kong, pero debido a que cancelamos Japón por los acontecimientos ya conocidos, Rumbos nos cambió la escala a ese destino.
Me tocó de Singapur a Hong Kong un asiento sobre la ventana derecha del avión y el viaje fue normal (ahora me pillo porque debemos tener un promedio de avión cada 3 días), lo que no fue normal fue el aterrizaje ya que viví una linda adrenalina. Como todos los aviones, nuestro vehículo abrió las alas para descender, y nos fuimos pa abajo, ya cuando estábamos a unos metros del agua miro para adelante y no había señal alguna de un pedacito de tierra firme para aterrizar ese avión, miro y miro y nada, como las azafatas estaban tranquis me imaginé que estaba todo liso, pero 10 segundos antes de aterrizar miré bien abajo y estábamos arriba de la pista pero la tierra estaba del otro lado, estábamos aterrizando en la parte derecha de una isla…un momento bastante interesante de vivir.
Realmente Hong Kong es un país de mil sabores y un olor (mezcla de puchero con mondongo), desde el punto gastronómico no me dieron los minutos para probar todo, comiendo desde unas bolas de camarones hasta panchos gigantes (más ricos que los shnek), pasando por tallarines de ajo, unas especies de albóndigas de carne muy pero muy picantes, hasta pan…si pan. Acá me detengo porque ya me habían dicho que en Asia no iba a encontrar pan, pero que me dijeron?? Es el mejor pan del mundo!! Hay unas especies de panaderías que venden diferentes tipos de panes rellenos, dulces y salados y la verdad que son muuuuy ricos y la masa es increíblemente esponjosa…muuuuy bueno, para cerrar el bloque del pan en el aeropuerto con los pesos que me sobraban me compré algo que pensé que era pan tipo marsellés gigante, y efectivamente era pan, o mejor dicho aceite con un poco de masa adentro…exquisito.
No tuvimos mucho tiempo para hacer compras pero como siempre el regateo está presente y nos deja con las balls por el piso, pero la verdad algunas cosas se podían comprar baratas, y más las cosas de marca, en el camino nos cruzamos con una pareja de vetes uruguayos (cuando no) y nos comentaban eso que Hong Kong es bueno para comprar cosas de marca, y China para cosas más truchas que además tienen diferentes calidades: trucho 1, trucho 2, trucho 3. Yo me dediqué a comprar comida, porque además tengo un bichito que me hace dar hambre todo el día, pero otra cosa no compré.
Uno de los días fuimos a ver un espectáculo tradicional chino por la calle, festejando el cumpleaños del dios del océano…muy tradicional pero para notros una cosa sin mucho chiste, estaba bueno porque veíamos los dragones típicos, pero nada del otro mundo y peor todavía cuando venían los chinos con los tambores improvisando un ritmo que no era ritmo sino golpeteo nomás (mi sobrino el Fede con menos de un año tiene más ritmo cuando golpea la mesa). Después de ese espectáculo nos fuimos a ver un buda gigante, supuestamente es el más grande del mundo (a puertas abiertas y de bronce creo que esto lo aclaran porque debe haber algún otro más grande). Para llegar se armo la discusión si ir por ómnibus o cable car, una especie de teleférico, yo estaba seguro que iba a tomar la segunda opción por más que vaya sólo, pero al final me acompañó alguno, la cola que hicimos para subir al aparatejo tardó como hora y media, y la de la vuelta tal vez un poco más, lo bueno que a la vuelta habían algunos puestos de comida y pude ir picoteando y probando nuevas cosas.
El buda la verdad que un gigante, muy bueno y más buena está que esté casi que en la cima de una montaña, cerca de ahí hay un monasterio budista dónde tienen unas esculturas bastantes lindas, y para saber un poco más de esa filosofía o región tomé prestado un librito con CD…bueno los regalaban no pienses que me lo afané…je, en esa zona estaba todo bastante nuevo y se notaba que seguían construyendo un templo más grande, otra cosa linda que para entrar no te cobran entrada, sino donaciones, eso me gusta, no por mi bolsillo sino porque me gusta ese gesto “no material”.
Ya el segundo día nos dedicamos a recorrer algún punto turístico y ya fue donde me puse nervioso porque evidentemente tenemos perfiles diferentes de viaje, a mi me gusta “perderme” y caminar por la ciudad descubriendo cosas nuevas y probando comidas locales, y casi que todo el resto que es más “estándar” y prefiere seguir un mapa al punto turístico y comer cosas más tradicionales. Bueno siguiendo un poco el mapa nos fuimos en taxi a un punto que ni sabíamos bien que era, lo lindo es que el taxi ni tenía idea a donde iba, se metió por cualquier calle, se en las bifurcaciones hasta el último momento no sabía para donde doblar, y preguntaba a un lote de personas dónde era ese destino, ta el tema que nos dejó en un lugar y le pagamos unos pesos menos evidentemente (encima que conocimos todo Hong Kong lo garcamos con la paga…je). El tema es que éramos 8 y fuimos 4 en cada taxi, cuando llegamos nos dimos cuenta que no era el punto exacto y los otros no estaban ahí. Lo anecdótico es que nos llevaron a un lugar dónde hay unas lanchas que te pasean por esa bahía y un chino nos ofreció el paseo (empezó en 120 y terminó en 60 por persona y estoy seguro que lo sacábamos más barato), le dijimos que esperábamos a los otros 4 y hasta no encontrarlos no hacíamos el paseo. El tema gracioso es que decidimos ir al punto correcto y tras preguntar a una familia nos dijeron que iban para ahí, nos subimos a un bote gratis, que al final nos llevó a un restaurant muy lindo pero horriblemente caro, y quién nos seguía?? El amigo del bote, nos siguió por un trecho de 15 min. Más o menos, y cuando nos bajamos del bote, el chino nos dice que el otro grupo venía en otro bote gratis de otro lado… ósea nos siguió por 15 min. Para decirnos que venían los otros en el barco, al final tomamos el paseo y estuvo muuuuy interesante.
A la noche fuimos a tomar un crucero por una bahía linda de Hong Kong pero para variar llegamos tarde y ya había zarpado el último crucero, pero la vista que teníamos de la bahía era suficiente, y mirando el paseo del otro río la verdad creo que no nos perdimos mucho.
Ya en el subte de la vuelta era muy gracioso ver como 6 de los 8 que volvíamos estaban dormidos, la verdad que un cansancio muy pero muy grande, al llegar al hostel, derecho para el sobre todos, torque el cansancio realmente era grande. Punto aparte de que ya somos expertos en subte, es increíblemente simple de usar y tremendo medio de transporte (igual cómo el de Singapur creo que no vamos a encontrar).
Si bien seguramente no recorrimos Hong Kong a pleno, pero creemos que entre 2 y 3 días nos dio para dar un buen pantallazo de esta ciudad. Fue fue muy lindo conocerla por lo diferente que es y las cosas nuevas por descubrir pero sin dudas que no está en la mejor posición de la tabla de lugares favoritos a visitar nuevamente.